Categoría: NO
DEBEMOS OLVIDAR
A
última hora de la tarde del
21
mayo 1985
37º
ANIVERSARIO
ETA asesinaba a los
policías nacionales
MÁXIMO DÍAZ BARDERA
FRANCISCO RIVAS LÓPEZ
Cuando paseaban, vestidos de paisano y fuera de
servicio, por una ladera del monte Ulía, entre San Sebastián y Pasajes-PAÍS
VASCO-ESPAÑA
Los terroristas abordaron a sus víctimas en un
paraje aislado y las mataron de un tiro a bocajarro en la cabeza.
Los agentes habían salido de paseo, con los
perros de ambos, en torno a las 16:00 horas.
Ya de noche, el perro de Francisco apareció en
su domicilio.
A las 21:00 horas, las familias de ambos
policías, extrañadas de que no hubiesen regresado, presentaron una denuncia.
Un centenar de
policías, ayudados por un helicóptero de la Guardia Civil, inició el rastreo
del monte, especialmente el paraje del Faro de la Plata, un lugar al que Máximo
y Francisco solían acudir habitualmente con sus perros.
Los cadáveres fueron
localizados pasadas las 10:00 horas del miércoles 22 de mayo, tras una noche de
intensos rastreos en el monte Ulía y una vez que, en torno a las 09:30 horas,
un autodenominado portavoz de ETA indicara al diario Egin el punto exacto del asesinato.
Varios policías se dirigieron hacia la zona y al
acercarse oyeron unos gemidos.
Siguiendo el quejido llegaron a una zona de
zarzales, donde encontraron los cuerpos tumbados boca arriba de los dos
policías, a ambos lados del sendero y a la misma altura, frente al mar.
La perra de Máximo aullaba de tristeza recostada
sobre el pecho de su dueño, y la mano del otro compañero descansaba sobre el
suelo, en una postura forzada.
Cerca de ambos, había un pequeño ramillete de
margaritas, al lado de un casquillo
AUNQUE A DÍA DE HOY NO HA SIDO JUZGADO NI CONDENADO NINGÚN ASESINO DE LA BANDA TERRORISTA ETA POR ESTE ATENTADO
LA CARTA
Hoy es martes, 21 de mayo de 1985.
Acabo de salir del cole y estoy esperando a que mi papá venga a
buscarme (...)
Es el mejor papá del mundo y el mejor policía.
En mi familia somos cinco personas: mi papá tiene 35 años, mamá tiene
30 años, yo soy la mayor de tres hermanos y tengo 8 años, y mis dos hermanos
tienen 6 y 3 años.
Somos una familia feliz (...)
Mi papá tarda mucho, los demás niños ya se han ido con sus papás y mi
papá no ha venido todavía. (...)
Estoy sola en el patio.
No lo entiendo.
Mi papá no viene.
Pero va a venir, porque la palabra de mi papá es ley y si me dijo que
venía es que va a venir.
Pues verán ustedes, mi padre no vino a buscarme esa tarde
al colegio, tuve que irme sola a casa.
Pero tampoco vino a casa esa noche...
Mi padre no volvió a casa nunca más.
Y recordaba que el
ramo de margaritas que se encontraron al lado de los cuerpos de Francisco y
Máximo eran para su madre y para ella:
Mi padre había cogido unas flores para mamá y para que yo, su hija
María del Pilar, le llevara flores a la Virgen, porque el mes de mayo, para los
católicos, es el mes de María.
Y la ETA les asesinó.
ETA nos asesinó a todos ese día (...)
Cuando asesinaron a papá, yo ocupé su lugar, dejando de ser una niña de
ocho años para ser el cabeza de familia.
Mis hermanos y yo no tuvimos más alternativa que ingresar en
colegios de huérfanos de los Cuerpos y Fuerzas de
Seguridad del Estado y de las Fuerzas Armadas.
En ellos hemos permanecido internos, hasta hace poco tiempo, cuando,
gracias a la Ley de Solidaridad con las Víctimas del Terrorismo del gobierno de
Aznar, pude comprar una casa y reunir en ella a mi familia.
Desde que conoció a Francisco José Alcaraz y
empezó a participar en la Rebelión Cívica por
él liderada, María del Pilar se siente menos sola.
Como declaró el 6 de noviembre de 2010 en el programa Sin Complejos de esRadio,
"cuando iba en la pancarta y miré hacia atrás y vi a toda esa gente
maravillosa, me sentí menos huérfana".
Por el contrario, también recordó cómo en los duros años que
tuvo que vivir en el País Vasco tras la muerte de su padre, cada vez que la
sociedad miraba hacia otro lado "hacía que me sintiera una apestada".
"Ya éramos víctimas del terrorismo desde que nacimos por
el hecho de ser hijos de nuestros padres, hijos de policías y guardias
civiles".
El asesinato de Máximo y Francisco nunca fue
resuelto judicialmente.
Incluso se ha afirmado que jamás se ha encontrado ningún dato
fidedigno que permitiera identificar a los autores del atentado.
Como relataba en la carta a El Mundo
(...)
Mi abogada y amiga, Manuela [Rubio Valero] y yo, empezamos a buscar
respuestas sobre el atentado de papá, ya que desde el
asesinato, mi familia y yo nunca hemos recibido información de
ningún tipo por parte de las instituciones publicas.
Y todo para descubrir que el asesinato de mi padre ha prescrito,
lo que implica que los asesinos nunca serán juzgados".
Y añadió: "Mi padre juró proteger a España y a los españoles de
bien, y ¡vive Dios, que cumplió su palabra!
A papá le asesinaron por ser España, porque su uniforme representa el
Estado de Derecho español, el Orden y la Ley.
Y en agradecimiento a sus servicios prestados a España, ni España, ni
el Estado de Derecho español, ni el Orden, ni la Ley han hecho justicia a un
hombre bueno, como papá, ni a otros muchos hombres buenos, que además, para
mayor indignación, eran sacados en sus féretros por la puerta de atrás de las
iglesias, a hurtadillas.
Con un gran abatimiento y con un sentimiento de desolación y
desconsuelo absolutos.
Con un inmenso dolor en mi corazón y en mi alma, me veo en la necesidad
de denunciar esta aberración legal que permite la prescripción de los delitos
de terrorismo.
El 26 de abril de
2011 María
del Pilar Díaz señaló a Libertad
Digital que la instrucción de este atentado, si se puede
llamar así a lo que se hizo en este caso, fue desastrosa.
Por ejemplo
"el juez de instrucción jamás pidió la inspección ocular del lugar de los
hechos a la Policía, que a su padre no le hicieron
autopsia, que no se investigó nada, que el juez nunca pidió informes a
la Policía", agregó. Para poder acceder al sumario del asesinato de su
padre, y tras encontrarse un montón de trabas por parte de la Audiencia
Nacional, María del Pilar amenazó con encadenarse a la puerta de la misma, tras
lo cual consiguió que se lo diesen, sumario "que tuvo que leer de pie, al
lado de una fotocopiadora y una papelera".
Sin embargo, hay al
menos dos informaciones publicadas en el diario ABC, nueve y diez años después del atentado (03/08/94
y 15/08/95), en las que se hace referencia a
Ramón Zapirain Tellechea como presunto
autor del asesinato de Máximo y Francisco. Zapirain integró,
junto a
Arturo Cubillas Fontán
Idoia López Riaño
José Angel Aguirre Aguirre, el denominado
grupo Oker de ETA.
Zapirain y Aguirre fueron detenidos en
noviembre de 1985 y, pese a ser considerados presuntos autores del asesinato de
Máximo y Francisco, no se les juzgó por este atentado, aunque sí por otros asesinatos,
como el de Facal Soto, cometido apenas tres meses antes que el de Máximo y
Francisco.
Por ello resulta cuando menos chocante que, diez años después, el diario ABC siguiese haciendo alusión a Zapirain Tellechea como presunto autor del asesinato de los dos policías.
No hay comentarios:
Publicar un comentario